viernes, 7 de noviembre de 2014

Cottage

Comparto un poco de música relajante para este fin de semana.

En esta ocasión es un tema de la película Legend, dirigida por el famoso director Ridley Scott (Blade Runner, Alien,...), y protagonizada por el no menos famoso Tom Cruise, que se estrenó en el año 1985.

El argumento es sencillo: en un bosque encantado la princesa va paseando, y la personificación del mal mata al unicornio para hacerse con el poder. Pero los buenos se enfrentan a él y salvan al mundo y a la princesa.

La banda sonora del film es original del grupo Tangerine Dream y el tema que viene a continuación lleva por título Cottage. ¡A disfrutar de un merecido descanso!




La Historia de la Semana

jueves, 30 de octubre de 2014

El náufrago

La historia de esta semana constituye un claro ejemplo de lo que no hay que hacer, narrado con una dosis de humor.

Como dice el refrán popular Las ocasiones hay que tomarlas al vuelo. O lo que es lo mismo: no hay que dejar pasar y desperdiciar las oportunidades que se nos presentan en la vida.

Y un aspecto importante en la madurez y desarrollo personal es la imaginación y la creatividad para afrontar las situaciones adversas. 

¡Todo lo contrario que el náufrago de nuestra historia de esta semana...!

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El náufrago

Un náufrago que había salvado su vida aferrándose a un madero después de que su embarcación se hundiera, vivía en solitario en una isla desierta.


Después de muchos años de silencio y penurias, una mañana vio como el mar traía hasta su playa una lámpara brillante y misteriosa. Dicen que el hombre, sin dudarlo, frotó la lámpara y un genio apareció.

- Voy a concederte dos deseos- dijo el genio- uno por rescatarme del mar, otro, por liberarme de mi encierro.


El hombre pensó en lo que había soñado durante todos estos años en la isla…  

- Quiero tener una botella de cerveza inagotable, irrompible y eterna.

- Eso es fácil- dijo el genio-. ¡Concedido!

Una pequeña nube apareció a los pies del náufrago y, dentro de ella, una botella de cerveza. 


 El hombre bebió de ella con desesperación. Cuando terminó de dar el trago más largo de su vida, miró la botella y comprobó que seguía llena. 

Rió a carcajadas y empezó a volcar la cerveza en la arena. El dorado líquido caía infinito en la playa, pero la botella no se vaciaba. 

Arrojó entonces su preciado tesoro contra una roca, pero el cristal no se rompió y la botella continuaba llena de cerveza hasta el borde. 
  
El hombre dio otro trago interminable y satisfecho se limpió la boca con la manga de la camisa… 
 
- ¿Cuál es tu segundo deseo?- preguntó el genio- ¿Necesitas tiempo para pensarlo?

El náufrago era insaciable, y ya se sabe que los insaciables son muy poco creativos…

- ¡No! - dijo el hombre de la isla solitaria- ¡Quiero tener otra botella igual! 


La Historia de la Semana

miércoles, 29 de octubre de 2014

La plegaria

En los momentos de dudas, dificultades, situaciones complicadas, un buen recurso es dirigirse a Dios para pedirle ayuda.

Este diálogo íntimo con Dios es lo que llamamos oración, pero suele surgir una pregunta importante: ¿cómo tiene que ser esta oración?

La historia de esta semana, que lleva por título La plegaria, viene a recordar que la mejor oración es la que se hace con sinceridad, con el corazón abierto a la respuesta de Dios auqnue muchas veces no sepamos qué decir.

Pues quien ve en lo escondido dde nuestro corazón es Dios y sabe lo más conveniente para cada uno de nosotros.
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La plegaria

Cierta vez, hace mucho tiempo, en un pequeño pueblo sucedió un milagro:



El río se desbordó y el agua, que avanzaba amenazando con destruirlo todo a su paso, se detuvo milagrosamente a la entrada del poblado sin dañar nada, sin lastimar a nadie.

El sacerdote agradeció a Dios el milagro, y esta vez Él contestó:

- La plegaria de Samuel me conmovió… – dijo el Señor. 


 
El sacerdote fue a ver Samuel, a quien todos tenían por el tonto del pueblo.

- ¿Qué oración dirigiste a Dios el día en que se detuvo el río?

- La verdad es que no sabía qué palabras usar –respondió Samuel–, de hecho no tenía conmigo el libro de las oraciones… 


Así que recité el abecedario y le dije al Todopoderoso: “Aquí están tus letras Señor, acomódalas y construye con ellas la mejor plegaria para que protejas este pueblo”.



La Historia de la Semana