martes, 2 de noviembre de 2010

Nirvana

La actualización musical de esta semana corresponde al tema Nirvana del grupo El Bosco, que fue muy famoso en todo el mundo hace unos cuantos años por la paz y serenidad que transmite. 

El coro que integra este grupo es el coro de voces blancas de la Escolanía del Monasterio de El Escorial, y sabe mezclar con maestría el ritmo clásico con instrumentos actuales así como el latín y el inglés, obteniendo una composición muy lograda y melodiosa.

El tema Nirvana está extraído del album Angelis, la música que te llevará al cielo

Espero que podais tomar un breve respiro de las actividades cotidianas para poder saborear esta bonita canción. 

Como siempre, la letra al final en versión original.
=============


=================
Nirvana

Et erunt signa in Sole, et Luna et stellis
et pressura gentium prae confusione sonitus maris.


(Habrá señales en el sol, en la luna y en las estrellas; 
y sobre la tierra, angustia de la gente, trastornada por el estruendo del mar)

Et erunt signa in Sole, et Luna et stellis
et pressura gentium prae confusione sonitus maris.

The word was in
in the beginning
in the beginning with God

And all the things
were made by him
and without him
wasn't anything.

The word was in
in the beginning
in the beginning with Buddha.

And all the things
were made by him
and without him
wasn't anything.

The Glory, Nirvana
Eternal, Nirvana
The Glory, Nirvana
Eternal, Nirvana

The Glory, Nirvana
Eternal, Nirvana
The Glory, Nirvana
Eternal, Nirvana
Et erunt signa in Sole, et Luna et stellis
et pressura gentium prae confusione sonitus maris.

The word was in
in the beginning
in the beginning with Alah.

And all the things
were made by him
and without him
wasn't anything.

The Glory, Nirvana
Eternal, Nirvana
The Glory, Nirvana
Eternal, Nirvana

The Glory, Nirvana
Eternal, Nirvana
The Glory, Nirvana
Eternal, Nirvana


Et erunt signa in Sole, et Luna et stellis
et pressura gentium prae confusione sonitus maris 

lunes, 1 de noviembre de 2010

Viaje a Tierra Santa - 1

Del 19 al 26 de octubre pasados tuve la inmensa gracia de acompañar a la parroquia de San José de Las Matas (Madrid) a una peregrinación a Tierra Santa para visitar los lugares más emblemáticos de nuestra fe cristiana y revivir íntimamente en nuestro corazón el caminar de Jesús por tierras de Palestina.

Fruto de ello es esta serie de artículos del blog en los que quiero dejar constancia de la vivencia personal de este viaje, si bien estará muy lejos de la realidad vivida in situ, ya que resulta difícil condensar en unas líneas toda la riqueza de sentimientos que se viven en esos instantes. Y será forzosamente una visión muy personal: cada peregrino lleva su alma preparada para unas expectativas y acoge la realidad acorde a ellas.
La primera dificultad ha sido seleccionar algunas fotos para compartir. A uno le gustaría poner todo el reportaje completo (casi 400 instantáneas) pero necesariamente hay que poner un filtro para no abusar de la paciencia de los lectores. Así que, una vez seleccionadas, iré comentándolas con las impresiones que me causaron.

Día 19. Y como de una peregrinación se trataba, nada mejor que iniciarla con una visita a la capilla de la terminal T4 de Barajas antes de comenzar el viaje, donde nuestro incansable guía Francisco Puértolas nos habló del sentimiento de alegría, recordando el versículo de la Anunciación: Alégrate llena de gracia...

Por imponderables de la logística no pudimos hacer el recorrido en sentido cronológico (desde la Anunciación del ángel a la Virgen hasta la Ascensión de Jesús a los cielos), pero creo que fue un inconveniente menor a la hora de saborear cada lugar. Así, tras los correspondientes trámites aduaneros llegamos al hotel en Jesusalén donde pasamos las primeras noches, catalogado por todos como el mejor hotel de los que nos hospedamos. En la foto, una vista de la muralla de la ciudad vieja de Jerusalén desde la terraza del hotel.

Día 20. Iniciamos la jornada en la iglesia de Betfagé donde se recuerda el comienzo de la entrada triunfal de Jesús en Jerusalén. Iglesia situada en un barrio mayoritariamente musulmán y a cargo de un franciscano que llevaba en Tierra Santa 30 años. Casi todos hemos oído hablar de la Custodia de Tierra Santa, encomendada a los franciscanos en el siglo XIV. Pero una cosa es haberlo oído y otra muy distinta ver con los propios ojos la inmensa labor de mantenimiento y restauración de los Santos Lugares que han llevado a cabo desde entonces, en medio de grandes dificultades y con numerosos mártires que han entregado allí su vida.

Cerca se encuentra el Monte de la Ascensión. Primera sorpresa: todo el entorno pertenece a una comunidad islámica y para visitarlo hay que pagarles a ellos. 
En la foto, en primer plano, el lugar donde se venera la huella que Cristo dejó al subir al cielo, y en segundo plano la mezquita musulmana (que no dejan visitar). En la época de los cruzados, estaba dentro de un templo y carecía de cúpula. Los otomanos derribaron el templo, tapiaron los arcos, lo cerraron con la cúpula y dejaron una pequeña puerta por la que se accede actualmente.


La siguiente visita es a la gruta del Pater Noster, donde según la tradición Jesús enseñó a rezar el Padrenuestro a los discípulos. En la actualidad está dirigido por una comunidad de religiosas carmelitas de clausura. En las paredes del claustro hay cerámicas con el Padrenuestro en casi 200 lenguas (¡incluida el gallego!).




Esta foto corresponde a una vista general de Jerusalén desde el lugar denominado Dominus Flevit, donde se recuerda que Cristo lloró por la ciudad y profetizó su destrucción. Aunque no se aprecia bien, todas las casas están recubiertas de piedra blanca típica de la zona, lo que de la un sabor especial a la ciudad.


En el lugar ocupado actualmente por la Mezquita de la Roca, como se conoce a la de la cúpula dorada, estaba el Templo de Jerusalén, y lo que se ve en primer término es la muralla que rodeaba la ciudad. Al pie de la muralla hay un cementario musulmán (lugar impuro para un judío y por tanto no se pueden acercar) y cerca del lugar donde está tomada la foto, un cementerio judío.

Toda la zona que estamos visitando se encuentra enclavada en el Monte de los Olivos, desde donde se tiene una vista general de la ciudad y Jesús paseaba con sus discípulos. Dentro de él está Getsemaní, donde Cristo oró y sudó sangre la noche de su pasión. En el jardín de la basílica que lo conmemora, conocida como Basílica de la Agonía o de Todas las Naciones, hay unos olivos milenarios, que datan de aquella época y son los más antiguos de los alrededores.


La siguiente visita es a una basílica griega ortodoxa donde se venera el lugar donde estuvo el cuerpo de la Virgen María antes de su Asunción. Nos resulta muy llamativa la abigarrada decoración bizantina de la iglesia y el anciano monje que te hace pasar a toda prisa por el lugar concreto y no te deja tomar fotos del mismo.


Después de comer nos disponemos a realizar el Via Crucis camino del Calvario, comenzando en la Basílica del Ecce Homo, donde están las hermanas de Nuestra Señora de Sión. Y tras recorrer la Via Dolorosa llegamos a la Basílica del Santo Sepulcro.
 
La basílica está compartida por seis confesiones cristianas: católicos (representados por los franciscanos), ortodoxos griegos, armenios, coptos, siríacos y abisinios. Debido a la gran cantidad de peregrinos de todo el mundo no pudimos disfrutar totalmente de la visita ni hacernos una idea de la magnificencia de la basílica. 

La foto corrresponde al lugar en cuyo interior se venera el sitio donde fue sepultado Jesús. Se accede únicamente por una pequeña puerta y como éramos tantos tuvimos que hacer la visita muy deprisa.


 La basílica está construida sobre el Gólgota, y engloba el lugar de la crucifixión y el lugar de la sepultura. Esta foto es del lugar donde estuvo clavada la cruz. Cuenta la historia que durante unas excavaciones apareció una estancia con cruces de la época romana utilizadas para crucificar a los reos, y que al pasar delante de una de ellas en particular los enfermos quedaban curados, por lo que se identificó como la cruz de Cristo, dando lugar al Lignum Crucis.


La foto oficial del grupo de peregrinos de la parroquia de San José:

(Viaje a Tierra Santa - 2)

viernes, 29 de octubre de 2010

Diccionario de la vida

Con el paso del tiempo las palabras van adquiriendo otros significados distintos del original, habitualmente perdiendo parte de su contenido semántico.

En esta ocasión comparto un sencillo diccionario escrito desde el sentimiento para describir algunas palabras que son claves en nuestra vida y que nos pueden servir para resituar nuestra percepción de las mismas, dentro de la línea del desarrollo de los mejores valores que llevamos en nuestreo corazón.

Se titula Diccionario de la vida. ¡Espero que os sirva!

======================
Diccionario de la vida

Adiós: Es cuando un corazón se va y deja la mitad con quien se queda.

Amigo: Es alguien que se queda para ayudar cuando todos los demás se alejan.

Amor al prójimo: Es cuando un extraño pasa a ser el amigo que todavía no abrazamos.

Caridad: Es cuando una persona tiene hambre y compartimos con ella la única galleta que tenemos.

Celos: Es cuando el corazón se retuerce porque no confía en sí mismo.

Cariño: Es cuando no encontramos ninguna palabra para expresar lo que sentimos y hablamos con las manos, colocando una caricia en cada dedo.


Evangelio: Es un libro que sólo se lee bien con el corazón.

Cordialidad: Es cuando amamos mucho a una persona y tratamos a todos los demás como a ella.

Evolución: Es cuando avanzamos y sentimos el deseo de buscar a los que van quedando atrás.

Hijos: Es cuando Dios pone una joya en nuestras manos y nos recomienda cuidarla.

Fe: Es cuando una persona dice que va a escalar el Everest y su corazón ya lo considera un hecho.

Comprensión: Es cuando un anciano camina lentamente delante de nosotros y, aunque tenemos prisa, no lo apuramos .

Envidia: Es cuando una persona todavía no descubrió que puede ser mejor que otra.

Enemistad: Es cuando una persona empuja bien lejos la línea del afecto.

Lágrima: Es cuando un corazón triste pide a los ojos que hablen por él.

Luto: Es una espina en el corazón que tarda en desaparecer.

Maldad: Es cuando arrancamos las alas al ángel que deberíamos ser.

Perfume: Es cuando reconocemos a quienes nos agradan, aun con los ojos cerrados.

Muerte: Es una separación con aroma de eternidad.

Nietos: Es cuando Dios envía ángeles para alegrar a los abuelos.

Orgullo: Es cuando una persona se siente hormiga y quiere convencer a los demás de que es un elefante.

Odio: Es cuando plantamos trigo todo el año, esperando que madure, y una persona lo quema todo en un día.

Perdón: Es liberar al corazón del peso de una enorme piedra.

Pesimismo: Es cuando una persona pierde la capacidad de ver la vida en colores.

Paz: Es el premio de quien cumple honestamente con su deber.

Pereza: Es cuando un virus entra en la voluntad y la enferma.

Rabia: Es cuando colocamos una muralla en el camino de la paz.

Simplicidad: Es el comportamiento de quien comienza a ser sabio.

Superfluo: Es cuando nuestra sed necesita una gota de agua y pedimos un río entero.

Soledad: Es cuando estamos rodeados de gente, pero nuestro corazón no ve a nadie alrededor.

Ternura: Es cuando alguien nos mira y sus ojos brillan como dos estrellas.

Vanidad: Es cuando una persona abdica de su esencia a favor de otra, generalmente peor.