Hay épocas de nuestra vida que vemos la vejez y la ancianidad muy lejanas (¿recordáis cuando una persona de 40 años era para nosotros una persona muy mayor?), pero poco a poco nos vamos acercando a ese momento tanto en lo personal como en las personas que nos rodean. ¡Es la ley de la vida, todos nos hacemos mayores!
El video que viene a continuación es un cortometraje griego de hace un par de años que nos hace reflexionar sobre el trato que damos a los ancianos, especialmente a los que tenemos más próximos a nosotros: nuestros padres. Ya hubo una entrada sobre este tema, pero no viene mal retomarlo.
Creo que merece la pena hacer un paréntesis en nuestras múltiples ocupaciones y dedicar cinco minutos para verlo porque es sumamente sugerente y profundo dentro de su sencillez.
Creo que merece la pena hacer un paréntesis en nuestras múltiples ocupaciones y dedicar cinco minutos para verlo porque es sumamente sugerente y profundo dentro de su sencillez.
¡Espero que os guste!