Hacer el Camino de Santiago constituye una experiencia enriquecedora en todos los órdenes. Y aunque las motivaciones para hacerlo son muy variadas, casi tantas como peregrinos, el sentimiento final que queda en lo íntimo del corazón es de gratitud por haber alcanzado la meta: el abrazo al Apóstol Santiago.
Por eso son numerosas las personas que cada año realizan el Camino: es mucho más que pasar unos días de vacaciones o conocer a mucha gente. Incluso hay quien vuelve como voluntario en alguno de los numerosos albergues que hay a lo largo del camino.
En esta ocasión nuestro grupo estaba formado por 17 personas de 7 nacionalidades distintas, siendo la parte alemana la más numerosa, y el inglés la ‘lengua oficial’. ¡Qué necesario es saber idiomas para moverse por el mundo!
A continuación viene una breve crónica de la Ruta Jacobea que hemos realizado este año, para que quede un bonito recuerdo de los momentos que hemos compartido durante estos días llenos de ilusión, alegría y amistad.
1ª etapa: Astorga – Foncebadón (23,9 km).
Una primera etapa para ir ‘calentando motores’. El clima acompaña perfectamente: fresco a la hora de caminar y, una vez aposentados, una tormenta de verano con granizo incluido que sorprende incluso a los nativos del lugar.
Nos acoge un buen amigo en cuyo restaurante La Taberna de Gaia (¡de visita obligada si se pasa por Foncebadón!) degustamos una cena típica del Bierzo en ambiente medieval.
2ª etapa: Foncebadón – Ponferrada (26,3 km).
Al poco de iniciar la etapa nos encontramos con la famosa Cruz de Ferro: una cruz en lo alto de un montículo formado por las piedras que los peregrinos van dejando como señal de desprendimiento de los pecados, tradición que se remonta a la edad media y que se sigue manteniendo en la actualidad.
Tras atravesar unos pueblos leoneses muy pintorescos (como El Acebo y Molinaseca) llegamos a Ponferrada, con su flamante castillo de los Caballeros del Temple, y donde el acceso al polideportivo que nos acoge se hace eterno e inacabable.
La monotonía del asfalto frente a la diversidad de los caminos rurales se hace notar... ¡y mucho!
3ª etapa: Ponferrada – Villafranca del Bierzo (19,2 km).
Seguimos en la provincia de León y antes de llegar a nuestro destino pasamos por un lugar conocido, Cacabelos, donde aprovechamos para descansar un rato antes de continuar.
Arribamos a Villafranca por la famosa Puerta del Perdón, donde ganaban las indulgencias aquellos peregrinos que estaban enfermos y no podían llegar hasta Santiago.
En Villafranca nos reciben las Hermanas Clarisas de la Anunciada, donde celebramos la Eucaristía y tuvimos un entrañable encuentro con ellas. Para algunos del grupo era la primera vez que estaban en un monasterio de clausura tan antiguo, y quedaron gratamente impresionados.
4ª etapa: Villafranca del Bierzo – Herrerías (19 km)
Ya se va notando el cansancio y cualquier lugar es bueno para descansar.
Esta es la última etapa en tierras leonesas y el paisaje va cambiando gradualmente mientras atravesamos varios pueblos muy pintorescos y típicos (Pereje, Trabadelo, Vega de Valcarce,...) hasta llegar a nuestro destino.
5ª etapa: Herrerías – Alto do Poio (18 km).
Dejamos atrás León y entramos en Galicia por la provincia de Lugo, un poco antes de llegar a un lugar importante dentro del Camino: O Cebreiro.
Aquí tuvo lugar uno de los milagros más importantes de la época y se conserva el cáliz donde el pan y el vino de consagrar se convirtieron en carne y sangre reales, cáliz que ha pasado a estar representado en el escudo de Galicia.
En la actualidad son los franciscanos quienes se encargan de este lugar y han elaborado una sencilla oración para los peregrinos, que han llamado Oración de O Cebreiro, que recuerda el himno de la caridad de San Pablo:
Aunque hubiera compartido todos mis bienes con gentes de otra lengua y cultura,
hecho amistad con peregrinos de mil senderos
o compartido albergue con santos y príncipes,
si no soy capaz de perdonar mañana a mi vecino,
no he llegado a ningún sitio.
Aunque hubiera cargado mi mochila de principio a fin
y esperado por cada peregrino necesitado de ánimo,
o cedido mi cama a quien llegó después,
y regalado mi botellín de agua a cambio de nada,
si de regreso a mi casa y mi trabajo no soy capaz
de crear fraternidad y poner alegría, paz y unidad,
no he llegado a ningún sitio.
Aunque hubiera visto todos los monumentos
y contemplado las mejores puestas de sol;
Aunque hubiera aprendido un saludo en cada idioma,
o probado el agua limpia de todas las fuentes,
si no he descubierto quién es autor
de tanta belleza gratuita y de tanta paz
no he llegado a ningún sitio.
Si a partir de hoy no sigo caminando en tus caminos,
buscando y viviendo según lo aprendido;
Si a partir de hoy no veo en cada persona,
amigo y enemigo, un compañero de camino;
Si a partir de hoy no reconozco a Dios,
como el único Dios de mi vida,
no he llegado a ningún sitio.
(Ruta Jacobea 2013 - 2)
La Historia de la Semana
Camino de Santiago en Europa |
En esta ocasión nuestro grupo estaba formado por 17 personas de 7 nacionalidades distintas, siendo la parte alemana la más numerosa, y el inglés la ‘lengua oficial’. ¡Qué necesario es saber idiomas para moverse por el mundo!
A continuación viene una breve crónica de la Ruta Jacobea que hemos realizado este año, para que quede un bonito recuerdo de los momentos que hemos compartido durante estos días llenos de ilusión, alegría y amistad.
Astorga |
Astorga |
1ª etapa: Astorga – Foncebadón (23,9 km).
Una primera etapa para ir ‘calentando motores’. El clima acompaña perfectamente: fresco a la hora de caminar y, una vez aposentados, una tormenta de verano con granizo incluido que sorprende incluso a los nativos del lugar.
La Taberna de Gaia |
Comienza la aventura |
El Acebo |
Cruz de Ferro |
2ª etapa: Foncebadón – Ponferrada (26,3 km).
Molinaseca |
Al poco de iniciar la etapa nos encontramos con la famosa Cruz de Ferro: una cruz en lo alto de un montículo formado por las piedras que los peregrinos van dejando como señal de desprendimiento de los pecados, tradición que se remonta a la edad media y que se sigue manteniendo en la actualidad.
Castillo de Ponferrada |
La monotonía del asfalto frente a la diversidad de los caminos rurales se hace notar... ¡y mucho!
3ª etapa: Ponferrada – Villafranca del Bierzo (19,2 km).
Crucero |
Puerta del Perdón |
Arribamos a Villafranca por la famosa Puerta del Perdón, donde ganaban las indulgencias aquellos peregrinos que estaban enfermos y no podían llegar hasta Santiago.
En Herrerías |
El necesario descanso |
4ª etapa: Villafranca del Bierzo – Herrerías (19 km)
Ya se va notando el cansancio y cualquier lugar es bueno para descansar.
Esta es la última etapa en tierras leonesas y el paisaje va cambiando gradualmente mientras atravesamos varios pueblos muy pintorescos y típicos (Pereje, Trabadelo, Vega de Valcarce,...) hasta llegar a nuestro destino.
5ª etapa: Herrerías – Alto do Poio (18 km).
Dejamos atrás León y entramos en Galicia por la provincia de Lugo, un poco antes de llegar a un lugar importante dentro del Camino: O Cebreiro.
Aquí tuvo lugar uno de los milagros más importantes de la época y se conserva el cáliz donde el pan y el vino de consagrar se convirtieron en carne y sangre reales, cáliz que ha pasado a estar representado en el escudo de Galicia.
En la actualidad son los franciscanos quienes se encargan de este lugar y han elaborado una sencilla oración para los peregrinos, que han llamado Oración de O Cebreiro, que recuerda el himno de la caridad de San Pablo:
Aunque hubiera compartido todos mis bienes con gentes de otra lengua y cultura,
hecho amistad con peregrinos de mil senderos
o compartido albergue con santos y príncipes,
si no soy capaz de perdonar mañana a mi vecino,
no he llegado a ningún sitio.
Aunque hubiera cargado mi mochila de principio a fin
y esperado por cada peregrino necesitado de ánimo,
o cedido mi cama a quien llegó después,
y regalado mi botellín de agua a cambio de nada,
si de regreso a mi casa y mi trabajo no soy capaz
de crear fraternidad y poner alegría, paz y unidad,
no he llegado a ningún sitio.
Aunque hubiera visto todos los monumentos
y contemplado las mejores puestas de sol;
Aunque hubiera aprendido un saludo en cada idioma,
o probado el agua limpia de todas las fuentes,
si no he descubierto quién es autor
de tanta belleza gratuita y de tanta paz
no he llegado a ningún sitio.
Si a partir de hoy no sigo caminando en tus caminos,
buscando y viviendo según lo aprendido;
Si a partir de hoy no veo en cada persona,
amigo y enemigo, un compañero de camino;
Si a partir de hoy no reconozco a Dios,
como el único Dios de mi vida,
no he llegado a ningún sitio.
¡Entramos en Galicia! |
La Historia de la Semana
Muchas gracias JOse María por compartir esta experiencia con nosotros. Después de ver estas fotos y leer lo que has escrito dan más ganas todavía de hacer el Camino de Santiago. Elisa
ResponderEliminar