Es indudable que el progreso material es bueno, ¡siempre que se aplique a todos por igual, claro!
Pero a veces no va acompañado del progreso personal y espiritual que dan el toque profundamente humano a nuestro existir.
Me ha llegado esta viñeta del genial Quino que muestra de manera magistral, con su toque de inocencia, hacia donde se van dirigiendo los valores que constituyen a la persona en estos inicios del siglo XXI.
Pero nos queda el consuelo de que al menos, al igual que con la famosa aldea gala de Asterix y Obelix, un grupo de irreductibles y entusiastas idealistas seguimos intentando batallar para que lo más noble, lo más grande, lo más hermoso y lo más alto del ser humano siempre esté presente en nuestro entorno.
Aquí van estas viñetas de Quino para hacernos reflexionar un poco más.
Comparto algunas cuestiones que me han hecho pensar y cavilar:
- ¿Cuál es mi escala de valores? (¡con tres es suficiente!)
- ¿Qué se destaca más en nuestro entorno, los valores o los contravalores?
- ¿Qué se destaca más en nuestro entorno, los valores o los contravalores?
- ¿Cuáles son para Quino los contravalores de meditación, humanidad, cultura, amor, honestidad, Dios? ¿Y para mí?
- ¿Qué valores observo en el entorno que me rodea?
- ¿Está la sociedad tan materializada como se apunta en la viñetas? ¿Añadiría alguna más?
- ¿Tenemos que educar a los niños como en las viñetas? ¿Podemos ir contra corriente?
Hola José María, soy Ada, la hija de Julio. Me han encantado las viñetas de Quino, de quien soy admiradora desde hace muchos años y quien me parece un genio. Podría ser profesor de filosofía en la mejor universidad. Imposible contarlo mejor ni con menos palabras. Gracias.
ResponderEliminar